ST. GEORGE — Miles de residentes de Utah podrían estar en riesgo de perder cuidado médico bajo el mandato laboral del Presidente Donald Trump para la cobertura de Medicaid.
Por otro lado, requerir a los habitantes de Utah que demuestren que están trabajando para recibir cobertura de Medicaid podría ser “una bendición en sus vidas para seguir adelante”, dijo Paul Edwards, subjefe de personal del Gobernador Gary Herbert.
Utah es uno de los 10 estados que ha solicitado una exención para aplicar el plan de Trump para un mandato de trabajar de Medicaid. Este plan permitiría a los estados a implementar requisitos de trabajo para los beneficiarios de Medicaid.
Si se implementa, una orden de trabajo para la cobertura de Medicaid podría dejar a más de 6’3 millones de norteamericanos sin cobertura médica, según un nuevo análisis por el Center for American Progress. Esto incluiría a miles de residentes de Utah que correrían el riesgo de perder la cobertura médica, dijo Stacy Stanford, analista de políticas de salud del Utah Health Policy Project.
Propósito de un mandato de trabajo
Un mandato de trabajo para la cobertura de Medicaid sería beneficioso para la mayoría de los beneficiarios de Medicaid a largo plazo, dijo Edwards.
“Realmente vemos esto como una parte importante en el paquete de apoyo general para las personas que se encuentran en la pobreza”, dijo Edwards. “Si necesitan este tipo de servicios porque se encuentran en una situación financiera difícil y si están en una situación, física y mentalmente, para asumir la responsabilidad adicional del trabajo, sería realmente una bendición y una oportunidad para que se conviertan autosuficiente”.
Los políticos, como Herbert y Trump, que creen que los requisitos laborales para Medicaid ayudaran a las personas a ser autosuficientes y salir de la pobreza están fuera de contacto, dijo Stanford.
“La mayoría de personas que reciben Medicaid en todo el país ya están trabajando”, dijo Stanford. “Eso es cierto en Utah también. Ya están empleados o están discapacitados, son cuidadores o van a la escuela”.
Los beneficiarios de Medicaid, como las personas discapacitadas o que tiene una condición que les impide trabajar, estarían exentos de un mandato laboral, dijo Edwards.
Un beneficio para el estado de que las personas abandonen la cobertura de Medicaid podría ahorrarles dinero a los contribuyentes, pero Edwards dijo que esa no es la motivación para que Herbert apoye un mandato laboral.
“Si hay un beneficio fiscal, mucho mejor”, dijo Edwards. “Pero el apoyo del Gobernador Gary Herbert se trata menos de los aspectos financieros, pero realmente se trata más de ayudar a las personas”.
Stanford dijo que un mandato laboral no le ahorraría al estado ningún dinero debido a todo el dinero que se gastaría para enforzarlo.
“Realmente es un desperdicio y está tratando de resolver un problema que no existe”, dijo Stanford. “Las personas no están sentados en casa comiendo Cheetos y disfrutando de todos los beneficios de Medicaid. En su mayoría, las personas no disfrutan de no trabajar”.
Encontrar un trabajo después del mandato de trabajo
Quitarles el Medicaid a las personas que están desempleadas tampoco les ayudaría a encontrar un trabajo más rápido, dijo Stanford.
“Lo primero que debe suceder para que su cuidado médico sea atendida es poder ir a ver al doctor y abordar cualquier problema crónico o problemas graves”, dijo Stanford. “Entonces puede buscar un empleo y poder mantener un trabajo mejor”.
Edwards dijo que si se implementa en Utah el mandato laboral para la cobertura de Medicaid, el estado proporcionaría recursos para que las personas encuentren un trabajo más fácil.
“Esto no sería solo “averiguar como conseguir un trabajo”, dijo Edwards. “Esto vendría con administración del caso y apoyo que los ayudaría a identificar las mejores oportunidades de trabajo para ellos y sus circunstancias”.
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